En el siguiente Diy, podéis ver la transformación que ha sufrido una modesta caja de queso .
Sólo necesitaréis:
Restos de tela y papel pintado
Cinta de raso estrecha y cinta valenciana ancha
Pegamento para textiles.
Lo primero por supuesto es limpiar y airear la caja.
A continuación haremos sobre la tela una circunferencia calcando la tapa y la base de la caja, después la pegaremos con el pegamento especial para textiles.
Después se mide la altura de la caja y se corta la tela a esa medida, pegamos, y en las juntas de tela pegamos la cinta de raso fina, quedándo de la siguiente manera.
He usado un papel con dibujo aterciopelado , y ha resultado una caja elegante que puede servir para guardar infinidad de cosas, y tambíén puede ser el envoltorio ideal para un regalo muy especial.