El estudio japonés Nendo es el creador de este proyecto de la conocida marca española de zapatos para su tienda en Nueva York. Destaca el color blanco como tonalidad principal que ayuda a dar protagonismo al producto y el rojo de la marca solo utilizado en el logo y en el mostrador.
Como elemento transgresor, el recubrir todas las paredes de zapatillas blancas empotradas en ella. Como elemento atractivo, la ausencia de sofás o sillas el cliente, se sienta a probarse en la pared en bancos integrados en la misma gracias a ello, se crea un espacio diáfano en el que el producto es la estrella principal de la tienda.