El color negro da profundidad visual al espacio, consiguiendo una sensación de amplitud e incorpora visualmente metros a la cocina. Se adapta perfectamente a cualquier estilo, creando ambientes muy personales y es único para dar un toque sofisticado.
Las cocinas negras rompen con la moda tan estereotipada de las cocinas siempre blancas. Tenemos la sensación de que el negro y los colores oscuros van a quitarnos luminosidad pero cuando se aplican sobre superficies continuas aportan sensación de amplitud.
Si nos arriesgamos, comprobaremos que tienen efectos muy interesantes sobre nuestra percepción de los espacios, contribuyen a destacar los detalles, los elementos de iluminación y la madera natural.
Sería conveniente tener aperturas considerables por las que pueda entrar la luz solar, o en su defecto una buena iluminación artificial que aporte claridad al espacio. Pero también hay otra posibilidad que será utilizar en paredes, suelos y techos, tonos y materiales cálidos que contrarresten.
Es cierto que en una cocina de dimensiones reducidas un “todo negro” no resulta un acierto, pero en cocinas espaciosas se trata de un color que da mucha profundidad y sofisticación, y resulta ideal combinado con otros colores. Normalmente, la combinación ganadora es blanco-negro, pero también con madera o cristal, especialmente este último, que contribuye a iluminar la estancia. En cuanto a las paredes, conviene inclinarse por tonos claros. Con colores vivos pueden haber un fuerte contraste pero también saturarnos.
Mantener la sencillez y calidad de los demás elementos de la cocina: eligir un pavimento y alicatados sencillos, prestar atención a las texturas, si las puertas son negras pon el interior del mueble en gris y no en blanco para evitar contrastes fuertes, si has elegido unas puertas negras con acabado brillo quedará mejor con una encimera lisa tipo Silestone o Corian. Haz los electrodomésticos integrables para quitar complicaciones de la cocina y tener menos combinaciones de colores y no más de tres en el mismo ambiente.
Utilizándo el color negro únicamente en la encimera, electrodomésticos o complementos, se consigue el efecto que produce este color.
El color oscuro aporta sobriedad y elegancia, da importancia a los espacios.
¿Qué os parece? ¿Os atreveríais con una cocina decorada en negro?
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