La cocina es un ambiente muy importante en nuestro hogar, ya que es ahí donde desarrollamos muchas de nuestras actividades diarias.
A mi entender, la iluminación de esta debe ser brillante y sin sombras.
Para que no sea un espacio monótono hay que evitar la iluminación uniforme, así pues, se debe acentuar zonas concretas como la mesa del comedor, la isla central (si se posee) y el resto con downlight, o lo que es lo mismo, focos empotrables de bajo consumo y la zona baja de los muebles con tiras de LED integradas.
Estos últimos focos tienen que estar bien ubicados en el techo para reducir las sombras, ayudando a los ojos a seleccionar los colores y texturas de los alimentos correctamente.
Las lámparas colgantes son las ideales para iluminar las mesas de las cocinas. Se debe colocar a unos 80 centímetros por encima de la mesa para crear un círculo de luz íntimo y acogedor. Incluso se puede instalar un dimer o regulador de intensidad, que permita ajustar la intensidad de la luz según las diferentes ocasiones.
Bueno, por hoy basta de lecciones magistrales…
Que disfrutéis del fin de semana.
!!Nos vemos el lunes!!
Josune Arrutia
