El color blanco es uno de los favoritos en la decoración del hogar en Navidad, no sólo porque es el color más versátil de todos y puede combinarse con cualquier estilo, sino por todo lo que representa e inspira. ¿Por qué no dejar de lado los colores navideños tradicionales y apostar por la pureza del blanco?
El blanco obró la magia de iluminar esta casa de indianos de la costa del Maresme (Barcelona), que data de 1865. Donde se ha creado un romántico escenario lleno de rincones mágicos para vivir una Navidad inolvidable.
La decoración navideña en blanco crea ambientes elegantes y luminosos. Es un color asociado a la luz, a la pureza y lo espiritual, que atrae energías positivas. Ciertamente, el blanco nos produce un estado de paz y tranquilidad.
Para la cena navideña no deben faltar las velas blancas, las cuales inspiran un sentimiento de paz, relajación e inicio de lo nuevo, se prenden al inicio de la cena simbolizando el nacimiento de todas las cosas positivas.
Si te gustan los ambientes clásicos y delicados combina blancos y dorados con algún detalle de cristal para tu decoración navideña.
Utiliza objetos blancos con diferentes texturas para mantener el interés y evitar la monotonía: en madera, tela, mármol, adornos de arcilla y velas.
El árbol navideño es el centro de toda la decoración de la casa por lo que es el primero que debe destacarse. Uno de los objetos decorativos más demandados en los últimos años es el árbol blanco que mantiene la imagen tradicional a la vez que da un toque moderno evocando los abetos nevados.
La navidad es una época perfecta para hacer que el espíritu de las fiestas llegue mediante la decoración. ¡Deja que la alegría de estas fiestas inunde tu hogar!
Imágenes vía: Stebbing house desing