Esta es una opción que la mayoría de las veces nos pasa casi desapercibida a la hora de plantearnos una reforma o cambio de decoración en nuestros espacios, o ni nos acordamos de ella, pero sin ir más lejos a veces puede resultar la elección más adecuada a nuestros problemas de espacio o simplemente a la elección de un diseño original y con lo cuál personalizado.
El mobiliario de obra trae consigo muchísimas ventajas que pesan más que los propios contras que nos podamos plantear.
- Se trata de mobiliario creado en el mismo espacio del que disponemos, con lo cuál aprovecha hasta el mínimo mm para actuar en él.
- Esta ventaja trae consigo la posibilidad de crear formas a veces ilimitadas (si hablamos de las placas de yeso o Pladur)
- Resultan mucho más resistentes de lo que nos podemos imaginar a si que este diseño lo podemos emplear para crear tanto librerías, como muebles de baño, vestidores…cocina…ect.
- Existen placas hidrófugas resistentes a la humedad,el cuál nos aporta aún más posibilidades de aplicación en baños y cocinas.
Si es verdad que existen varios tipos para llevar a cabo este diseño, una es a base de placas de yeso, tan conocido como «Pladur», o placas de escayola,la cuál requiere una fácil mano de obra y la otra, más robusta y consistente a base de ladrillo que por lo general, encarece la obra.
Una única desventaja a parte de las consecuencias que trae consigo una obra (posterior limpieza) es la durabilidad de esta, ya que termina convirtiéndose en mobiliario permanente y fijo.
El resultado final son estancias limpias que pueden aportar tanto un toque clásico, rústico, como contemporáneo o minimalista.