Determinar cuáles son las características imprescindibles del perfecto dormitorio para chicos adolescentes no es una cuestión sencilla, pues cada uno de ellos tiene gustos, aficiones y personalidades diferentes. Por esa razón, cuando mi amiga Cristina me pidió consejo sobre la renovación del dormitorio de su hijo, no me atreví a ofrecerle soluciones sin tener en cuenta los gustos del chico.
Creo que, mientras nuestros hijos son pequeños, los padres somos los encargados de diseñar y organizar su dormitorio; sin embargo, a medida que estos van creciendo, la situación cambia paulatinamente sin que apenas nos demos cuenta y un buen día comprobamos que aquel dormitorio que compramos cuando el niño tomó la Primera Comunión le resulta ahora infantil según los gustos de un adolescente.
Así que el primer consejo que ofrezco siempre en este tema es que dejéis que opinen y que decidan la decoración que le gustaría que tenga su territorio, pues al fin y al cabo, entre esas cuatro paredes será donde va a pasar gran parte de su tiempo a solas o con sus amigos. No obstante, también os aconsejo que vuestra condescendencia no exceda los límites que vosotros deberéis marcar, ya que le tenéis que dejar claro que ese dormitorio forma parte de vuestro hogar y que en él existen unas normas de convivencia que se han de cumplir.
Otro hecho a tener en cuenta es que la adolescencia comprende una franja de edad en la que se producen constantes cambios en los jóvenes y en la misma medida, la decoración que escoja deberá ir adaptándose a ellos. No es lo mismo un chaval de 13 años que uno de 18. De manera que, si no queréis que a partir de los 15 o 16 rechace su dormitorio, decoradlo desde el principio con la posibilidad de incorporar ciertas modificaciones en la habitación a medida que vuestro hijo vaya creciendo.
Comprobaréis, asimismo, que los jóvenes adolescentes de hoy en día son más coquetos y presumidos que lo que eran los de hace unas décadas. El culto al cuerpo y el cuidado de la imagen que transmiten a los demás son muy importantes para ellos, así que no está demás que disponga de un espejo en algún lugar estratégico del dormitorio. Detrás de la puerta de la habitación o del baño o en la parte interior del armario serán buenas opciones para instalarlo.
La zona de estudio también es muy necesaria e importante para ellos. Escoged un lugar bien iluminado, a ser posible cerca de una ventana para situar allí su escritorio y los suficientes estantes donde colocar sus libros y material de trabajo. No olvidéis que el ordenador es un elemento imprescindible en sus vidas, tanto en el aspecto lúdico como en el de trabajo y estudio y que este requiere un mueble de mayores dimensiones que las que tenía el anterior escritorio donde pintaba o realizaba las pequeñas tareas del colegio años atrás.
A partir de aquí, dejad que disfrute diseñando su espacio vital y no olvidéis que cuánto más a gusto se encuentre en él, más tiempo pasará sin salir de allí y, si así ocurre, esperemos que esas horas las aproveche con los libros de texto.