Según la misma Lois Greenfield confiesa:
«He pasado los últimos treinta y cinco años de carrera investigando el movimiento fotográfico y su potencial expresivo. Mi inspiración ha sido siempre la capacidad de la fotografía para detener el tiempo y revelar lo que el ojo humano no puede ver. Lo que me intriga es captar imágenes que confundan al espectador, pero aun así, que el espectador sepa o sospeche lo que realmente sucedió.
El tema aparente de mis fotografías puede ser el movimiento, pero el subtexto es el tiempo. Los movimientos de un bailarín ilustran el paso del tiempo, lo que supone una sustancia, la materialidad, y el espacio. En mis fotografías, se detiene el tiempo, una fracción de segundo se convierte en una eternidad, y un momento efímero es sólido como una escultura. Mi interés por la fotografía no radica en capturar una imagen que veo o, incluso, retenerla en mi mente, sino en explorar el potencial de momentos que yo solo puedo empezar a imaginar.
Prefiero trabajar fuera de las restricciones de la coreografía, colaborando con bailarines en momentos improvisados e irrepetibles y, a menudo, de alto riesgo. Estos momentos son existen sólo como instantes aislados. Hay una tensión dinámica entre la danza y la fotografía. Exploto la capacidad de la fotografía para fragmentar el tiempo y la segmentación espacial, trasladando 360 grados en una imagen bidimensional, que representa momentos por debajo del umbral de la percepción.
Me estoy ocupando de un lenguaje visual poético. Quiero que mis imágenes desafíen la explicación racional. No hay una «respuesta racional» a las preguntas que plantean mis fotografías- las cuales enmarcan contradicciones, presentan lo imposible, y encuentran coherencia en el caos. Todas mis fotografías se toman como una sola imagen con la cámara. Nunca se retoco ni modifico mis imágenes. Su veracidad como documentos aporta cierto misterio a mi trabajo, y el surrealismo de este proviene del hecho de que nuestros cerebros no registren las décimas de segundo del movimiento».
Lois Greenfield nació el 18 de abril de 1949 en Nueva York. Con el transcurso de los años, esta fotógrafa americana es reconocida mundialmente por su enfoque único para fotografiar la figura humana en movimiento. Cursó sus estudios universitarios en la Universidad de Brandeis, donde se graduó en Antropología con la esperanza de convertirse en directora de películas de carácter etnográfico; sin embargo, en lugar de ello se convirtió en una reportera gráfica de los periódicos locales de Boston.
Su carrera dio un giro a mediados de la década de 1970 cuando se le encomendó cubrir la información de un festival. Desde entonces se ha especializado en fotografiar bailarines como parte de su exploración sobre las posibilidades expresivas del movimiento.
Asimismo, ha creado un sinnúmero de imágenes clásicas de las compañías de danza más conocidas del mundo, como Alvin Ailey, Martha Graham, Merce Cunningham, Paul Taylor, Bill T Jones / Arnie Zane, y el American Ballet Theatre. Su trabajo ha sido publicado en innumerables revistas y expuesto en museos y galerías de todo el mundo. En la actualidad, reside en la ciudad de Nueva York e imparte talleres y conferencias en escuelas de todo el mundo.