Es sin duda una de las reformas más comunes en las casas: el cambio de una bañera por una ducha. Y es que estos cambios han aumentado gracias a la enorme cantidad de oferta que hay en platos de ducha. Un plato de ducha resulta económico de instalar y también a largo plazo. También se adapta a las medidas de cada cuarto de baño, y son fáciles de limpiar. En Conducha encontrarás la mejor selección de platos de ducha, para encontrar el que mejor se adapta a ti y a tu hogar. La verdad es que sí, cada vez más personas se pasan a la ducha, ya que las ventajas son muchísimas. Algunas de ellas son las que siguen:
Tu cuarto de baño dará una mayor sensación de amplitud
Es de cajón. La bañera ocupa mucho más espacio que una ducha, de modo que cuando sustituyes una bañera por una ducha liberas un montón de espacio que puedes emplear para otras cosas. Esta es una de las principales razones por las que la gente se decanta por una ducha, y más aún cuando normalmente, en el día a día, tampoco es que haya mucho tiempo para darse un baño. Y es que hoy en día el espacio no abunda en los cuartos de baño.
Tu factura del agua será más barata
Pero el ahorro no se limita únicamente al espacio, sino también a tu bolsillo. Con una ducha se gasta menos agua al ducharte. De ese modo, se consume menos agua y se cuida un poco más del planeta, un detalle que, gota a gota, suma.
Mayor comodidad para todos
Una bañera no solo consume más espacio, sino que nos quita tiempo también. Y es que limpiar una bañera lleva más tiempo que limpiar una ducha, de modo que tendrás más tiempo para dedicarle a otras cosas. Además, en este mundo frenético en el que vivimos, la mayoría de las veces optamos de facto por una rápida ducha. Y, para eso, no hay nada mejor que instalar directamente la ducha y dejar de lado las incomodidades que supone meterse en una bañera.