Sencillez pura y dura. Es lo que me enamora de este sitio. Todo está en su lugar, tiene lo necesario, sin estridencias, todo tiene su función, todo está ordenado. En la cocina se encuentra el comedor, que es un espacio abierto al salón. Esta es una distribución muy extendida en el extranjero y realmente me parece la más funcional aunque en España nos resistamos a ella.
Hay una zona de estudio debajo de la escalera, un lugar bien aprovechado con un montón de sitio para almacenar.
En el dormitorio, la cama me recuerda a la de los hospitales de la guerra, y no le ayudan mucho las lámparas, sin embargo, tiene mucha personalidad. El techo en madera da la sensación de dormir en una cabaña.
En uno de los baños también veo un aire retro, será por los azulejos, tan típicos. Todos tenemos en mente alguna película con un baño parecido…
Me gusta el cuadro con la bandera americana, y el grifo rojo del baño, el hueco para los cuencos del perro, las lámparas estilo industrial, la barandilla de madera de la escalera…