Para lograr el mejor resultado en los trabajos de pintura es importante aplicar el producto adecuado y hacerlo de la forma correcta. Además hay que cerciorarse antes de pintar de que la superficie se halla en perfectas condiciones y lista para recibir la pintura. En muchos casos, antes de pintar, habrá que realizar una imprimación con un producto específico. ¿Qué es una imprimación? En Pinturae te lo explicamos.
Preparar antes de pintar, una máxima que siempre repetimos para lograr el mejor resultado. Tener excesiva prisa en meternos con el rodillo a aplicar pintura puede resultar nefasto para el resultado final, pese a que la pintura sea de excelente calidad y nuestras ganas sean también insuperables. En este proceso de preparación del soporte hay que observar que la superficie que vamos a pintar está preparada. Es un paso previo pero a la larga nos ahorraremos tiempo y pintura.
Primero eliminaremos el polvo y repararemos los desperfectos. Entonces es posible que ya estemos listos para aplicar la pintura. Aun así hay superficies que por su especial diseño o material requieren de un tratamiento previo a la pintura como por ejemplo el metal, el hierro, los azulejos, el gres o la propia madera.
Aquí entra en juego la imprimación; el proceso que implica la aplicación de una capa previa de un material específico para que la pintura cumpla con su trabajo y el resultado y la durabilidad sean los deseados.
Como os hemos comentado en otras ocasiones hay van algunos consejos:
– Si el soporte que vamos a pintar es metálico: Debe estar limpio y libre de óxido y es recomendable lijar antes de pintar. Siempre es recomendable dar una imprimación previa ya que nos permitirá que nuestro trabajo final sea más duradero.
– Si el soporte que vamos a pintar es madera: Debe estar limpia y libre de pinturas antiguas por lo que es necesario realizar un trabajo de lijado previo.
- Si vamos a esmaltar la madera recomendamos dar previamente una selladora para madera.
- Si vamos a barnizar la madera con un producto de poro abierto tipo lasur es recomendable, aunque no imprescindible, dar una mano de un fondo protector para madera que sea de poro abierto.
También en ocasiones es necesaria una aplicación que sirva como sellador en paredes con excesivo poro y así evitar un consumo excesivo de pinturas o bien como consolidante en caso de paredes muy polvorientas o con restos de cal o pinturas antiguas mal adheridas. En este caso recomendamos dar una mano de sellador con el fin de dejar la pared preparada para pintar. La imprimación también es una buena opción para paredes en obra nueva que presenten soportes muy absorbentes como paneles de carton/yeso (pladur), y si las paredes no han sido pintadas correctamente, puede que tengamos un problema de absorción, es decir la pared absorbe mucha pintura. En estos casos, recomendamos dar previamente al pintado una capa de un sellador con el fin de dejar la pared bien sellada. Es un paso previo pero nos ahorraremos tiempo y pintura.
Y además recordad que la imprimación es un proceso que puede ayudar a solucionar problemas de humedad, manchas de tabaco, comida. Más adelante os explicaremos productos específicos para superar estas dificultades.