Karim Rashid ha diseñado el restaurante Amoje Food Capital en Seúl (Corea del Sur), un espacio que ha pasado de ser una cafetería típica a un entorno de experiencias sensoriales.
Se trata de un espacio de colores llamativos y formas «technorganic», que fomentan las interacciones personales de los comensales; el diseño utiliza columnas como núcleos de las mesas, fomentando así el diálogo y la socialización entre los clientes.
Los patrones de techo curvos se extienden para ocultar las luces que brillan suavemente, mezclando la tecnología y los productos orgánicos. Las luminarias individuales de gran variedad de geometrías acentúan el techo entre sus líneas orgánicas.
En los muros perimetrales, las estaciones de bocadillos están talladas, sus aberturas se superponen en una paleta de madera de ondas circunscritas. Las formas sinuosas que sobresalen del espacio y los colores brillantes se dispersan por todas partes, sirven para ocultar las cajas registradoras y al mismo tiempo, hacerlas identificables.
Las formas ayudan en la orientación de los clientes, creando recorridos claros dentro de la compleja red de asientos. Cuando esté desocupado, podemos observar que el patrón de suelo delinea movimiento dentro del espacio.
En definitiva, toda una experiencia para los sentidos, con el sello de Karim.