Las pinturas de Scott Naismith se caracterizan por una aplicación vigorosa del color. Sus vibrantes y atmosféricos óleos representan las rápidas variaciones de luz que se producen en la costa oeste de Escocia, su tierra natal.
El artista tiene su estudio en Glasgow, aunque dedica gran parte de su tiempo a viajar por todo el país en busca de inspiración, recreando en sus cuadros el genuino paisaje escocés, con sus numerosos lagos o cañadas y las islas de la costa oeste.
Los motivos para sus pinturas provienen de los cielos de transición y los efectos que producen las nubes sobre la luz y el color a través de sus propiedades translúcidas y opacas. Las nubes tienen la capacidad de refractar y reflejar la luz, rompiéndola en múltiples tonalidades y creando una percepción cambiante que inspiran a Naismith en su uso del color.
El artista también ejerce como profesor en el departamento de Artes Creativas de Reid Kerr College y ha publicado un trabajo de investigación en su canal de youtube donde expone su “verdad sobre la rueda del color” (ha tenido más de 1´1 millones de visitas) Según el autor, los colores primarios en el sistema sustractivo son cian, magenta y amarillo, en lugar de azul y rojo.
¡Muy interesante!