La reforma de este singular apartamento en el Barrio Gótico de Barcelona empezó por la eliminación de los tabiques de esta antigua vivienda, generando un espacio prácticamente diáfano y diseñando una segunda altura extraordinaria.
La parte baja incorpora por un lado la cocina con una pequeña despensa, la zona de comedor y el salón, los cuales están compuestos por el mobiliario mínimo (una mesa de comedor para ocho comensales y un sofá más dos butacas). Por otro lado alberga un baño y uno de los tres dormitorios existentes, escondido tras la pared de madera que sube de suelo a techo.
El suelo revestido con un original y triangular Mosaico hidráulico separa mediante su color las dos zonas de la vivienda.
La pieza clave es la estructura que genera el segundo nivel, con una escalera de acceso situada frente la cocina. En ella se ha creado una zona de lectura dotada de varias estanterías y aloja también dos habitaciones y un baño más. Con ella se genera también el hall, donde una corredera de latón da la bienvenida al precioso apartamento.
La forma triangular del comedor viene dada por la propia estructura del característico edificio esquinero del Carrer Avinyó de Barcelona.
A continuación os muestro la planta del primer nivel y el alzado general:
Este singular proyecto ha sido el ganador en la categoría residencial de los Inside Awards 2013, entregado en Singapur, lugar donde se ha celebrado el World Festival of Interiors.