Paloma Bey es una artista madrileña que reside en Alicante desde hace muchos años. Se licenció en Bellas Artes por la Universidad Politécnica de Valencia y fue allí, también, donde obtuvo el máster en producción artística.
Según ella misma nos cuenta, después de trabajar como profesora, diseñadora gráfica y hacer sus pinitos en fotografía, está inmersa en varios proyectos que le absorben gran parte de su tiempo: «Estoy sacando adelante una empresa de I+D moldes y me dedico a escribir poesía y a experimentar en el mundo de la ilustración, el cual es relativamente nuevo para mí».
En la serie All I own fits on my back, Paloma da rienda suelta a su creatividad y nos muestra sin reservas cómo plasmar al máximo la expresividad de los animales. Para ella, estos «son explosiones de color. Me encanta la inocencia que transmiten, aunque sean feroces, pero, principalmente, porque todo lo que tienen lo llevan a la espalda, es decir, son libres de forma diferente a como somos los humanos».
En sus obras, Paloma logra transmitir con destreza y desenfado la espontaneidad que para ella es fundamental. Sus pinturas son explosiones de color y de vida. En ellas la mirada cobra un valor especial, pues es el vehículo a través del cual nos muestra el alma que el animal guarda en su interior.
Dado que uno de los últimos proyectos en los que ha volcado su creatividad es la poesía, Paloma Bey ha sabido conjugar con maestría los textos poéticos que escribe con las ilustraciones que realiza, logrando, así entre ellos, un perfecto maridaje del que desborda una sincera y armoniosa originalidad ante nuestros ojos.