En Pinturae hablamos a menudo de las cartas de colores y de su importancia a la hora de elegir un color. Te explicamos para qué sirven y por qué es necesario tener una antes de elegir un color.
La carta de colores es un elemento indispensable antes de pintar. Podemos caer en el error de escoger un color porque lo hemos visto en casa de un amigo, en una fotografía o en una pantalla de ordenador y llevarnos una sorpresa desagradable cuando compramos la pintura de nuestro «color» y vemos que no es el mismo. La distinta percepción de tenemos del color y la diferencia a la hora de la aplicación definitiva en la superficie sobre la que vamos a trabajar, por ejemplo, una pared de un salón, es uno de los principales caballos de batalla. Recuerda que las imágenes de los colores son la aproximación más fiable a la realidad, pero dependen de tu monitor, de la luz natural o artificial que refleje sobre tu pantalla, etc., y puede haber una ligera variación con respecto al color real.
Como tienda de pinturas online en Pinturae hemos dado un paso al frente para conseguir la solución definitiva: «que el color que elijas y compres sea el color que quieras realmente y el que pensabas que iba a ser y no otro». Para eso una de las herramientas que utilizamos es la carta de colores, que no es otra cosa que un muestrario que el fabricante de pinturas realiza, de tal forma que es una aproximación lo más fiable posible al color final que vas a comprar. A cada color se le asigna un código que sirve para identificarlo de forma única. Existen muchas cartas de colores y habrás oido hablar de ellas como Pantone, dirigida principalmente al mundo del diseño y de la impresión, RAL (Reichsausschuß für Lieferbedingungen und Gütesicherung –Comité Estatal para plazos de entrega y garantía de calidad-) o NCS (Natural Colour System) definidas bajo sistemas propios estandarizados y muy utilizadas en el mundo industrial y de la pintura. Estas son las más famosas pero existen muchísimas cartas por el mercado, principalmente de las grandes multinacionales de la pintura. Nosotros como fabricantes hemos diseñado una carta de colores propia y limitada a 150 colores para no «marear la perdiz» y que reúne todas las gamas cromáticas. Con un número de colores más reducido pero más eficaz.
Te recomendamos tener a mano una carta de color antes de pintar e incluso una vez que elijas el color y si tienes dudas entre varios, hagas pruebas con ellas antes de comprar toda la pintura. Esta opción puede resultar un poco más engorrosa y te puede costar unos euros pero nada comparable a encontrarte con un par de botes de un color que no es el que creías.