Elegir la herramienta adecuada para pintar garantiza el éxito del trabajo. ¿Con qué pintamos, con brocha o con rodillo? Las dos herramientas nos sirven pero cada una tiene unas características y usos que en Pinturae te explicamos.
¿Qué necesitamos para pintar? Empecemos por conocer un poco más del rodillo, un indispensable para tus trabajos de pintura. Existen varios tipos de rodillo. Para superficies lisas o semilisas puedes utilizar un rodillo estándar antigota. Existen de diferentes medidas y materiales. Te recomendamos que uses los de poliamida y que tengan sistema antigoteo. Si la pared es de gotelé, está muy rugosa o es una pared de exterior –fachadas, muros–te recomendamos un rodillo para relieves porque tiene mayor rendimiento y acepta mayor capacidad de carga de pintura. También existe el rodillo de «esmaltar» que, por sus características, es indicado para trabajos de esmaltado, lacado o barnizado en superficies lisas (metálicas o de madera).
Los rodillos te permitirán un acabado más uniforme y realizar el trabajo de forma más rápida y cómoda. Recuerda que para pintar techos o la parte superior de las paredes un alargador es también necesario.
Y ¿cuándo usamos las brochas? Esta herramienta es un indispensable para tus trabajos de pintura. Sus diferentes medidas y grosores sirven de excelente complemento al rodillo para recortar y retocar aquellas zonas más complicadas o de difícil acceso como aristas y rincones, o bien para detalles, marcos, molduras y juntas. Con el fin de garantizar un buen trabajo y una óptima durabilidad y manejo elige brochas de calidad.
Existen varios tipos, la conocida como brocha o brocha prensada que es apta para uso con pinturas plásticas, esmaltes, etc. Se utiliza para recortes y retoques menos precisos. Si buscamos precisión debemos utilizar otro tipo de brochas conocidas como paletinas especialmente indicadas para pintar superficies planas. La largura de las cerdas de las paletinas les hace especialmente recomendadas en la aplicación de esmaltes, barnices y lacas aunque puede utilizarse óptimamente con cualquier pintura plástica. Si la superficie es de muy difícil acceso utilizaremos pinceles redondos o paletinas especiales para radiador o tubos de calefacción que cuentan con el mango especialmente diseñado.
Por último indicar que existen también minirodillos destinados a trabajos precisos o al uso de pinturas especiales que te permitirán pintar con la comodidad del rodillo y con la precisión de las brochas. Se presentan de forma independiente con adaptadores o varillas y también existen de varios tipos como para sus «hermanos mayores» (gotelé, velour o pelo corto, esponja o antigota, etc.).
Recuerda que antes de pintar debes de controlar y tener preparado todas las herramientas necesarias y, sin duda, los rodillos y las brochas, paletinas o pinceles son fundamentales.